viernes, 20 de agosto de 2010

Ni los abuelitos se salvan

Mirar a los ojos a un abuelo nos llena de alegría, nos transmite ternura, felicidad y cariño. ÉL ya cumplió con su tarea y le queda disfrutar de la vida, de su familia, de sus amigos, etc.
Sin embargo, hace unos años, muchos abuelos que deberían estar en sus hogares descansando y con la tranquilidad de que el Estado los renmunera por sus actividades prestadas, están desconcertados mediante la lucha por el beneficio del 82% móvil.
Qué paradoja, los que tienen que descansar salen a las calles a defender un derecho que les corresponde, los sueldos son miserables, la inflación crece; mientras, los gobernantes creen que hacen maravillas con los planes.
Hasta dónde llegó nuestro país. El país que todos o, quizas, la mayoría amamos. El país que vió crecer a tantos, que dió trabajos a millones de personas. El país del mundo del revés donde nuestros abuelos dicen presente en las calles de la Plaza Independencia (San Miguel de Tucumán) cada miércoles, no importa si hace frio o calor, ellos están y sólo piden ser escuchados, piden que el 82% móvil también los beneficie.
La media sanción de la ley de este beneficio llenó de alegría a muchas personas retiradas pero todavía continua la batalla. El Gobierno argumenta que de sancionarse habría default y existe la posibilidad de vetar la ley.
¿Hasta cuando seguirán esperando los abuelos por un salario digno? ¿Será posible que después de tantos años de trabajo aún continúen con la lucha por sus derechos?
Qué tristeza pensar que estas personas tan dignas, como todas, tengan que despertarse cada mañana con la ilusión de hacer realidad el sueño de un salario digno y de una mejor calidad de vida.
Realmente vivimos en un país que cada día nos sorprende más, mejor dicho los gobernantes nos sorprenden. Depende de cada uno luchar por una Nación mejor, donde todos seamos iguales y dignos. No pensemos en partidos políticos sino en personas que puedan gorbernar honestamente y dignifiquen a todos con trabajo, salud y educación.
Es hora de tomar conciencia de que los abuelos merecen disfrutar de su vida y no esperar que sea miércoles para hacerse presentes en 25 de Mayo primera cuadra. Aunque sea un minuto ponete a pensar en ellos. ¿Se merecen lo que están viviendo?

jueves, 12 de agosto de 2010

Conciencia natural



Recuerdo hace unos años cuando en mi querido Santa María todos éramos felices porque aparecía una nueva esperanza: Minera Alumbrera. Nos sorprendíamos al ver los inmensos camiones que se pasaban por la ciudad. Muchos pensamos que el cambio estaba en marcha.
Con el paso del tiempo, no sólo los pobladores de Santa María sino también de Andalgalá, Belén y otros departamentos de la provincia de Catamarca empezaron a preocuparse por la situación ambiental. La muerte de muchos animales, el deterioro de las plantaciones y la mala calidad del agua, el aire y el suelo llamaron la atención. Los agricultores, de alguna manera, fueron los primeros en notar que algo andaba mal.
Tiempo después, la mayoría de la población se concientizó sobre la problemática. Sin embargo, una nueva noticia sorprendía a todos: la apertura de otro emprendimiento minero, Agua Rica. Un emprendimiento que ocuparía millones de litros de agua del aquífero El Arenal, ubicado a kilómetros de Santa María. Como consecuencia de esto, muchos ciudadanos salieron a protestar y la lucha de concientización continuó. En Andalgalá los protestantes fueron reprimidos, no pensaron que allí se encontraban niños, mujeres, ancianos.
Hoy pasaron muchos años de aquella iniciativa pero el sentimiento de lucha para defender el madio ambiente sigue presente. Muchos estarán felices por la media sancion a la Ley de Glaciares, es un paso enorme para conservar lo que nos pertenece y nos albergará por el resto de nuestras vidas.
Continuemos con la lucha, defendamos la naturaleza, no bajemos los brazos. Aunque parezca extraño, en nuestro país, todavía existen personas que defienden lo nuestro y no se dejan engañar por intereses económicos.

NO A LA CONTAMINACIÓN, SI A LA VIDA.

EL AGUA VALE MÁS QUE EL ORO.

domingo, 8 de agosto de 2010

Un día del Niño Más

Desde que tenemos uso de razón recordamos que en el Dia del Niño la mejor sorpresa es recibir un regalo, lo mejor es un juguete, ropa, videojuegos, etc. En mi memoria aún recuerdo lo que mis padres me regalaban, la bici roja con canastito, la muñeca con ropita para cambiarle, tantos juguetes y ropa que, quizas, en ese momento no lo valoraba.
La vida siempre nos hace conocer o vivir situaciones extremas, nos hace descubrir que la pobreza existe, a pesar de que nuestro pensamiento de niño no tiene en cuenta esas cosas. Lo más palpable sería cuando vamos por la calle y un niño nos pide moneditas o vemos a otros con su "bolsa". En ese momento nos preguntamos ¿por qué será que en esta sociedad tantos niños no disfrutan plenamente de su niñez y se vuelven exclavos de un placer? ¿Por qué unos se mueren de hambre y otros tienen los juguetes más sofisticados del mercado? ¿Por qué la inseguridad interrumpe la vida de estos solcitos? Son tantas las preguntas que podríamos hacernos un día como hoy.
Los tiempos no son los mismos. Los niños ahora maduran a temprana edad y, en algunos casos, ellos eligen su regalo y los padres solo tiene que acceder a comprárselo porque lo mejor es ver felices a sus hijos. Mientras que otros sólo se conforman con un simple autito, pelota o muñeca de plástico. No está de más decir que hasta una chocolatada los hace felices.
Qué bueno sería reflexionar sobre este Día del Niño, pensar si todos los que habitan este pueblo realmente hoy sonreirán y revalidarán su derecho de Niño, si hoy serán felices con lo poco o mucho que tienen; a pesar de vivir en una sociedad insegura, en la que importa el consumo, la imagen, todo lo superficial. En la que los sentimientos poco importan pero seguramente hay personas que aún se preocupan por llenar de alegría el corazoncito de muchos con pequeños obsequios, por mas simples que sean.

¡FELIZ DÍA!